CONTEXTO
El príncipe Rainiero III decidió, en los años 80, poner fin a la construcción de edificios de gran altura en Mónaco. Pero el Principado no podía extenderse infinitamente, por lo que el príncipe Alberto II decidió en 2009 desarrollar la ciudad verticalmente. La torre Odéon se inscribe en esta lógica.
Dada su reducida superficie (2 km2), edificar en Mónaco es un gran desafío. La ubicación de esta obra en la ladera de una montaña requiere el dominio de numerosas técnicas de ingeniería civil. Su limitada superficie en planta requirió múltiples cálculos de cimentaciones.