CONTEXTO
La voluntad de los arquitectos Guillaume Segond y Claude Guyon al diseñar este edificio era reforzar la identidad vegetal del complejo y la necesidad de controlar la seguridad del mismo.
Estas exigencias llevaron a los arquitectos a replantearse el edificio en 2 partes: una para la embajada, con su dispositivo de seguridad, la otra para el instituto abierto al público. El reto del proyecto radicaba, por tanto, en concebir un único edificio coherente que aunara estas dos funciones distintas. Para responder a este objetivo de unidad, los arquitectos agruparon ambos edificios en un basamento común.